La
formación viene siendo en nuestras instituciones de educación superior, una de
sus actividades sustantivas, es así como habría que esperar que la misma
tuviera todos los elementos que permitieran un análisis y valoración de lo que
se hace, por qué se hace y para qué se hace, más sin embargo en la práctica el
peso de esto gira en torno a un solo elemento, el docente, excluyendo los
insumos del proceso y al alumno.
En
una ocasión se me invitó a analizar lo que se pretendía sería un nuevo
instrumento de evaluación docente. Si bien la evaluación docente es algo más
que común en la mayoría de las universidades, desde mi punto de vista su
alcance es limitado en lo que se desea obtener: la formación del alumno.
Comento esto porque la pregunta inicial que hice se refería precisamente a la
intención subyacente en el análisis que de ese nuevo instrumento haríamos
(siempre es bueno el preguntar el por qué hace uno lo que hace), la respuesta
tendía, sí, a evaluar al docente, pero dado que el docente es parte de un
proceso volví sobre mi pregunta para que se me clarificara la intención de
evaluar al maestro, la respuesta que perfilé ya desde el inicio iba a que la
intención es ir mejorando la labor del docente en lo que se refiere al proceso
formativo del alumno.
Proceso
formativo del alumno. Cuando uno hace las preguntas correctas obtiene las
respuestas correctas, luego entonces el esfuerzo de evaluar al docente tiene
una sola finalidad que es la del proceso formativo del alumno, siendo así,
¿dónde están evaluados los otros elementos de dicho proceso? Si vemos el
proceso formativo del alumno como lo que es, un proceso, debe haber más
elementos que intervengan en el mismo, y siguiendo esta lógica podemos concluir
que si esos elementos no son identificados y evaluados bien pueden dar al
traste los esfuerzos de mejora que se hagan sobre uno de ellos (como en este
caso el docente) por más loables que
sean esos esfuerzos.
¿Y
cuáles son esos otros elementos que podemos identificar? Aparte del docente por
lo menos otros dos: los insumos del mismo proceso y, algo que a veces se pasa
por alto, el mismo alumno. A reserva de explayarnos en estos elementos podemos
adelantar que los insumos es todo aquello que proporciona la institución y
coadyuva al proceso formativo, en cuanto al alumno, si bien no es necesario
definir la persona, si es necesario establecer las responsabilidades propias de
ella para limitar los ámbitos de acción de ella misma y el docente.
Los
insumos, como ya se adelantó, es todo aquello que proporciona la institución y
coadyuva al proceso formativo, ejemplo de esto son las bibliotecas y el acervo
bibliográfico que tengan las universidades, las aulas (tanto en cantidad como
en calidad), los sistemas tecnológicos que soporten los procesos (tanto
académicos como administrativos) que la universidad pone a disposición tanto
del maestro como del alumno, los espacios institucionales para el desarrollo de
las actividades curriculares y extra-curriculares, etc.
Por
ejemplo, demos por sentado que una universidad cuenta con la mejor planta
docente: capacitada, motivada, con experiencia, pero la biblioteca así como su
acervo bibliográfico es insuficiente para la demanda del alumnado, o en el caso
del acervo bibliográfico éste está sumamente desactualizado, el resultado sería
un proceso defectuoso con un resultado formativo deficiente. De igual forma si,
aunque se contara con esa planta docente de excelencia, las aulas fueran
insuficientes o de ínfima calidad, los sistemas tecnológicos no se dieran
abasto o no respondieran a las necesidades y perfiles de los usuarios, o los
espacios institucionales no solo no fueran suficientes sino no funcionales,
¿qué podríamos esperar de este proceso?. Aún así, ¿en qué instrumento se evalúan
los insumos para tratar de mejorarlos con relación al proceso formativo del
alumno?
El
docente tiene ciertas responsabilidades que deben ser cubiertas por él, de la
misma forma la institución tiene ciertas responsabilidades relativa a los
insumos que debe aportar al proceso formativo del alumno, pero de la misma
manera el alumno tiene sus propias responsabilidades que deben ser
cumplimentadas para dar por satisfecho los requerimientos mínimos del proceso
formativo para pensar en una conclusión exitosa del mismo.
¿Cómo
qué cosas son responsabilidad del alumno? Pueden señalarse por ejemplo el
cumplimiento en tiempo y forma, en extensión y profundidad, de las actividades
que él debe realizar aunadas al proceso formativo. Importante es entender,
sobre todo de parte del docente, que el alumno universitario es un adulto en
toda la extensión de la palabra y como tal debe ser tratado, no como en
ocasiones en que se pretende abordarlo como un menor de edad al que no solo hay
que decirle que debe hacer sino incluso guiarlo casi de la mano para asegurarse
que lo haga.
¿Por
qué esta reflexión? Por una simple y sencilla razón. Constantemente las
universidades son criticadas por la sociedad cuando de la primera egresan
profesionistas que no cumplen con los mínimos requeridos por la segunda,
recayendo siempre este señalamiento en la responsabilidad que sobre de ello
tiene el profesorado, sin pretender quitar en lo más mínimo la responsabilidad
que sobre el perfil del docente debe cumplirse, es un acto de justicia el señalar
que en el proceso formativo del alumno hay elementos relacionados con los
insumos que proporciona la universidad y las responsabilidades que el mismo
alumno debe cumplir que inciden en su perfil como profesionista y que por ello
también deben ser evaluadas.
Lo
que no se evalúa no puede mejorarse, dice un aforismo, y este enunciado es
verdad en el sentido de que si uno no tienen manera de valorar lo que está
haciendo no hay forma de detectar áreas de mejora, en cuanto al proceso
formativo del alumno la evaluación docente es un elemento de gran valor,
practicidad y aplicabilidad para ello, pero no el único que debería valorarse
siendo que los insumos que proporciona la universidad y la responsabilidad del
alumno otros elementos que deben incorporarse en este proceso de mejora
continua.
Roberto
Celaya Figueroa, Sc.D.
Formación
• I+D+i • Consultoría
Desarrollo
Empresarial - Gestión Universitaria - Liderazgo Emprendedor
Este
artículo puede verse en video en https://youtu.be/8tEDftheexQ
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